4.2. Independencia de los datos

 

Los dos tipos de independencia de los datos se han explicado.

En este subapartado veremos cómo la arquitectura de tres niveles que acabamos de presentar nos proporciona los dos tipos de independencia de los datos:la física y la lógica.

 

Hay independencia física cuando los cambios en la organización física de la BD no afectan al mundo exterior (es decir, los programas usuarios
o los usuarios directos).

De acuerdo con la arquitectura ANSI/SPARC, habrá independencia física cuando los cambios en el esquema interno no afecten al esquema conceptual ni a los esquemas externos.

Figura 5

 

 

Es obvio que cuando cambiemos unos datos de un soporte a otro, o los cambiemos de lugar dentro de un soporte, no se verán afectados ni los programas de aplicación ni los usuarios directos, ya que no se modificará el esquema conceptual ni el externo. Sin embargo, tampoco tendrían que verse afectados si cambiásemos, por ejemplo, el método de acceso a unos registros determinados*, el formato o la codificación, etc. Ninguno de estos casos debería afectar al

 * Por ejemplo, eliminando un índice en árbol-B o sustituyéndolo por un              hashing.                                                

mundo exterior, sino sólo a la BD física, el esquema interno, etc.

 

Si hay independencia física de los datos, lo único que variará al cambiar el esquema interno son las correspondencias entre el esquema conceptual y el interno. Obviamente, la mayoría de los cambios del esquema interno obligarán a rehacer la BD real (la física).

Hay independencia lógica cuando los usuarios* no se ven afectados por los cambios en el nivel lógico.

 

* Programas de aplicacióno usuarios directos.

Figura 6

 

Dados los dos niveles lógicos de la arquitectura ANSI/SPARC, diferenciaremos las dos situaciones siguientes:

Si eliminamos...
... el atributo apellido, por ejemplo, no se verán afectados los esquemas externos (ni los usuarios) que no hagan referencia a este atributo.
Si se alarga el atributo dirección al esquema conceptual, no será necesario modificar el esquema externo donde se ha definido la dirección.

1) Cambios en el esquema conceptual. Un cambio de este tipo no afectará a los esquemas externos que no hagan referencia a las entidades o a los atributos modificados.

2) Cambios en los esquemas externos. Efectuar cambios en un esquema externo afectará a los usuarios que utilicen los elementos modificados. Sin embargo, no debería afectar a los demás usuarios ni al esquema conceptual, y tampoco, en consecuencia, al esquema interno y a la BD física.

Usuarios no afectados por los cambios

Notad que no todos los cambios de elementos de un esquema externo afectarán a sus usuarios. Veamos un ejemplo de ello: antes hemos visto que cuando eliminábamos el atributo apellido del esquema conceptual, debíamos modificar el esquema externo donde definíamos nombre, porque allí estaba definido como concatenación de nombre y apellido. Pues bien, un programa que utilizase el atributo nombre no se vería afectado si modificásemos el esquema externo de modo que nombre fuese la concatenación de nombre y una cadena constante (por ejemplo, toda en blanco). Como resultado, habría desaparecido el apellido de nombre, sin que hubiera sido necesario modificar el programa.

 

Los SGBD actuales proporcionan bastante independencia lógica, pero menos de la que haría falta, ya que las exigencias de cambios constantes en el SI piden grados muy elevados de flexibilidad. Los sistemas de ficheros tradicionales, en cambio, no ofrecen ninguna independencia lógica.